Disney se reorganiza para centrarse en el streaming. Parece que el anuncio de Disney para concentrar más esfuerzos en llevar a cabo un cambio estratégico y lógico, está levantando ampollas en el sector, desde los cines hasta las distribuidoras están haciendo lo posible para que el cambio no se haga, pero es algo que parece que no van a poder evitar. ¿Cuál es la alternativa si no? Es decir, qué tiene que hacer Disney para subsistir e incluso aumentar su producción si no es amoldándose a los cambios.
El canal de streaming Disney tiene apenas un año en el mercado, pero ha sido una historia de éxito para Disney, superando su objetivo de cinco años para atraer a más de 60 millones de suscriptores en solo nueve meses. Pero el servicio ha sido un desafío estructural para el estudio y el centro de una lucha de poder sobre quién tiene la última palabra en la alineación de programación del streaming.
Disney podría poner fin a esa disputa con su reestructuración del 12 de octubre, que da a sus líderes de estudio un mayor control sobre el contenido que crean para medios como Disney+ mientras consolida todas las decisiones de presupuesto y distribución bajo el nuevo grupo Disney Media and Entertainment Distribution liderado por el ex-ejecutivo de productos de consumo. Pero no está claro cómo se llevará a cabo este nuevo acuerdo en la práctica.
Bajo la nueva estructura, el grupo trabajará con los estudios para determinar sus presupuestos generales y dictar las necesidades de contenido de distribuidores como Disney+ y ABC. Ese grupo también hará la llamada sobre si un proyecto está destinado a la televisión teatral, lineal o a la distribución de streaming. Pero una vez que se hayan tomado esas decisiones, los presidentes de Los estudios Horn y Bergman, el presidente de General Entertainment, Peter Rice, y el presidente de Sports, Jimmy Pitaro, tendrán la última palabra sobre el producto terminado.
Eso significa que los ejecutivos de Disney+ no se meterán en las decisiones de casting ni ofrecerán notas creativas, y el equipo de Strauss se centrará más en la programación y la curación que en el desarrollo de contenido.
Aunque los cambios están destinados a fomentar la colaboración entre divisiones y crear un camino más claro para completar el proyecto. Algunos de los interesados que tienen negocios con Disney son escépticos. Warner Media y NBC Universal, que han centralizado la toma de decisiones creativas a medida que priorizan los nuevos servicios de streaming; se han enfrentado a críticas similares
La reorganización de Disney cambia la forma en que se ha manejado la distribución de películas en los estudios de Hollywood. Por lo general, los ejecutivos de distribución tratan con los propietarios de cines, establecen fechas de lanzamiento y calculan cuánto podría hacer un proyecto en la taquilla, tanto en el extranjero como a nivel nacional.
Ahora dependerá del grupo de Daniel averiguar qué cliente se sirve mejor en qué plataforma. Cathleen Taff, que se ha desempeñado como jefa de distribución mundial de películas desde mediados de 2018, no se unirá al nuevo equipo de Daniel; sino que seguirá con el grupo de contenido como presidente de servicios de producción, gestión de franquicias y compromiso multicultural.
Los dueños de los cines están nerviosos ya que la consolidación del poder de distribución bajo otro grupo significa que los ejecutivos de cine de Disney no tendrán la misma relación con los jefes de cine. Harán más contenido. Simplemente no se preocuparán por venderlo. Este era un sistema que iba a ser eventualmente interrumpido, incluso antes de la pandemia.
La ansiedad es alta entre los principales creativos que están preocupados de que. A medida que las empresas de medios de comunicación tratan de aumentar sus servicios de streaming; perderán en la participación lucrativa de beneficios que proviene de un lanzamiento en el cine.
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