El libertador largometraje con técnica de animación híbrida, se trata de una mini serie de cuatro capítulos de corte dramático que se estrenará en plataforma digital este 11 de noviembre, la serie está basada en un hecho histórico real protagonizada por el ejército de los Estados Unidos en la lucha que mantuvo su batallón de infantería durante 500 días, durante la marcha desde Italia hasta Dachau, esta es la primera producida con la tecnología de animación híbrida mejorada de Trioscope.
El proyecto es el primero producido en Trioscope Enhanced Hybrid Animation, una nueva tecnología pendiente de patente que combina CGI de última generación con actuación de acción en vivo, diseñada para ofrecer un nivel sin precedentes de emoción y fidelidad a la experiencia animada. Jonkajtys desarrolló la tecnología Trioscope junto con los socios L.C. Crowley y Brandon Barr. El proyecto marca el primer gran proyecto de Trioscope con Netflix y sirve como su introducción al medio para historias dramáticas a gran escala. Crowley, junto con Barr, sirven como productores.
Decidimos desde el principio que Trioscope era perfecto para este proyecto porque centra todo en las actuaciones de los actores, lo que da a la fidelidad emocional una historia como el Libertador merece, explica Jonkajtys. Trioscope ha hecho algunos avances significativos en el flujo de píxeles y el seguimiento, por lo que ya no tenemos que depender de formas dibujadas a mano o rotoscopia.
El Libertador, basado en el libro con el mismo título y escrito por Alex Kershaw, cuenta la fascinante historia real de la marcha más sangrienta y dramática hacia la victoria de la Segunda Guerra Mundial, la odisea del campo de batalla del inconformista oficial del Ejército de los Estados Unidos Felix Sparks y su unidad de infantería mientras luchaban durante más de 500 días para liberar Europa. En todos los niveles, Sparks y su batallón de Thunderbirds eran soldados ciudadanos clásicos, y durante más de 500 días, lucharon desde Italia hasta Francia por la liberación de Dachau, a través de algunas de las batallas más agotadoras de la guerra. Este grupo de hombres no sólo se fusionó en una fuerza de combate a tener en cuenta, sino que se convirtió en una de las unidades de combate estadounidenses más decoradas de la Segunda Guerra Mundial.
Sparks, que murió en 2007, pasó 10 años en el ejército antes de retirarse como coronel justo después del final de la Segunda Guerra Mundial. Después de entrenar en estado, fue enviado a Argelia, desde donde participó en la invasión de Italia, finalmente luchando a través de Francia, participando en la batalla de las Ardenas y la eventual derrota alemana. Como se detalla en el libro de Kershaw, descubrir los horrores de Dachau llevó a algunos de los hombres de Sparks a ejecutar sumariamente soldados alemanes capturados.
Volviendo a la vida civil, se convirtió en abogado, un fiscal de distrito de Colorado, más tarde sirviendo en la Corte Suprema de Colorado y como comandante de la Guardia Nacional de Colorado, retirándose como General de Brigada.