Poca inversión y proyección internacional para el diseño gráfico

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a fecha de hoy, el diseño gráfico es ya una de las principales fuentes de autoempleo, se está convirtiendo en un semillero de microempresas para los profesionales formados en el ámbito de las nuevas tecnologías, con muchas áreas de actividad: diseño gráfico, animación, animación en 3d, infografía, diseño de páginas web. No hay datos económicos específicos, más, allá del sector que aglutina el diseño de productos, gráfico, de interiores y moda, pero no contempla actividades como diseño digital, agencias de comunicación, publicidad, marketing y estudios de arquitectura, que también forman parte de la actividad del diseñador gráfico.

Por su propia naturaleza y el perfil profesional, se trata de un sector muy atomizado, formado en su mayor parte por profesionales independientes y microempresas, constituidas por uno o varios emprendedores con experiencia previa en el sector que dominan la actividad y controlan todo el proceso, desde el diseño inicial hasta la presentación del producto acabado.

En este contexto, un diseñador gráfico puede poner en marcha su propia empresa en 24 horas por un coste que apenas supera los 100 euros (40 para el registro mercantil y 60 para el notario). Son los requisitos para crear una sociedad limitada cuyo capital social no supere los 3.100 euros y cuya actividad no está sujeta a colegiarse ni a supervisión administrativa en forma de licencia.

El modelo encaja. De hecho, puede ser el punto de partida para un profesional que ya cuenta con equipos básicos y trabaja en casa. En ese caso hay dos fórmulas básicas adecuadas para desarrollar la actividad: en calidad de autónomo o mediante la creación de una SL. También encaja el perfil profesional, capaz de concentrar diversas funciones y responsabilidades para reducir al máximo los costes, al menos en la fase inicial de la empresa. Es un modelo habitual, el emprendedor es jefe y empleado a la vez, creativo, gestor y comercial. También se adapta a la fórmula mediante la cual varios socios crean una SL y colaboran en calidad de autónomos.

Tramites e inversión.

La creación de un gabinete de diseño gráfico está sujeta a los tramites ordinarios de constitución de un negocio. Los gastos de constitución son básicos en el caso de este tipo de empresas. Una vez decidida la figura jurídica, los pasos básicos son: reservar la denominación social (el nombre de la empresa) en el registro mercantil central, ingresar el capital en una cuenta bancaria y obtener el justificante pertinente, redactar los estatutos de la sociedad y obtener la escritura pública, gestión realizada por un notario, inscribirse en el registro mercantil de la provincia del domicilio social de la sociedad y solicitar el NIF y darse de alta en el IAE (impuesto de actividades económicas), en la delegación de hacienda.

Una empresa puede estar registrada en más de un epígrafe, de hecho, en función de la actividad hay varios que encajan: 844: servicios de publicidad, relaciones públicas o similares; 845: explotación electrónica por cuenta de terceros, o 474: artes gráficas (impresión gráfica). Si la empresa va a contar con un local propio en el que es preciso hacer obras, necesitara una licencia municipal. En función de cada ayuntamiento, y las características del local, podría necesitar licencia de actividad y de apertura.

La principal inversión de este tipo de empresas recae en los equipos informáticos. La media puede rondar entre los 5.000 y los 8.000 euros por puesto de trabajo, en función del ordenador y partiendo de dos programas básicos de diseño más impresora y escáner.

No es necesario tener una formación académica específica, no hace falta carné profesional ni colegiacción, pero pocas profesiones necesitan de formación continua como esta. El personal especializado suele ser licenciado en ciencias de la información y licenciado en bellas artes, titulado medio o superior en diseño gráfico, y un repertorio de cursos profesionales, cursos de postgrado y másteres. La dimensión creativa debe completarse con un departamento de gestión administrativa o contar con el apoyo de un servicio asesor. Existen programas específicos de formación empresarial para profesionales y empresas, como los promovidos por la empresa nacional de innovación (enisa) y la escuela de organización industrial, que el pasado mes de Julio presentaron la cuarta edición del programa formativo dirigido al sector del diseño y las industrias creativas.

También es necesaria una actualización permanente de los equipos tecnológicos. En este caso, se puede recurrir a empresas de leasing tecnológico o financieras de consumo para poner en marcha el negocio reduciendo al máximo la necesidad de capital inicial.

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